domingo, marzo 29

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Quiero dormir y no despertar hasta que sea junio, que de pronto me ataque el verano con el sol intenso y aire seco; que vengan tus labios a despertarme entre todo el polvo y caos vehicular. Sé que no será así, ni lo más remotamente cercano y que tendré que vivirme los días intermedios como si siempre fuera hoy, aunque siempre es hoy y no hay remedio. Quisiera no sentirme tan perdido dentro de mí, poder salirme tantito de todo, para darte el espacio que te mereces y saberme perdido porque todo es un extrañamiento meramente previsto. pasan los días y si, cada día es una pequeña victoria porque sé que falta menos para poder tener cerca, para caer el uno en el otro, para hacernos pedazos y terminar con todo lo que nos atañe; pero cada día es también una derrota pues la lista de cosas se va haciendo larga, y hay más cosas arrastrando y de pronto todo es el preámbulo del sueño y ya es más fácil dormir; peor el sueño ya no es en las horas regular y todo se va desfasando poco a poco y al final ya nada cabe donde se supone debía ir.

¿Me estoy desfasando?

A momentos siento como pequeños golpes de melancolía, porque es un subidón tenerle cerca, ya saben, es como todo está bien, y hay cierto nivel que nunca baja, peor luego , cuando se va, me quedo como varado y es estúpido saben, no soy del tipo que se queda varado, soy más bien del tipo frenético, del que sigue en movimiento hasta encontrarse de nuevo, porque el quedarse varado es morir, no quiero morir dos veces.

Por otra parte está esta sensación de miedo, que probablemente es infundado, peor ya saben las noches de insomnio son muy productivas y para esto se pintan solas. Tengo esta dualidad entre miedo y confianza, en la cual ella tiene mi confianza absoluta porque estas cosas no es que sean así, sin más bien realmente confío en ella, pero el miedo es natural quiero suponer pues hay mucho en juego.

¿A que idiota se la ha ocurrió hacer esa relación absurda entre el juego y las relaciones?

me refiero, siempre se dice que hay mucho en juego, que todo queda siendo mera suerte o determinada configuración de características, pero el hecho de que implique un juego, un azar una posibilidad que elimina de tajo la otra parte, también tiene una probabilidad de éxito. en las relaciones no existe dicha posibilidad, pues desde el comienzo uno está aceptando, y va como perdiendo todo y ganando, peor creo que es un perder-perder; si al final todo resulta un desastre, se abre la caja y el gato está muerto, no hay más. Pueden seguir con sus vidas, tratando de retomarlas donde les dejaron y tratar de limpiarse el polvo de la ropa, agarrando algo de aire y caminando. el otro escenario es abres la caja y el jodido gato está vivo; te quedas sigue pasando el tiempo y ya sabes hay esas historias donde todo va bien siempre y el amor los mantiene juntos y felices, claro no conozco muchos de esos casos, hay días malos dentro de todo está escenario feliz, porque no somos un jodido cuento en el cuál todo salga de maravilla y cada día estemos estancados como personajes y seguimos haciendo las mismas cosas. Creo que este es el punto de inflexión al cual quería llegar, sigo jodidamente haciendo lo mismo, estancado, como tratando de no tocar nada, tratar de no contaminar la escena, no meter nada ajeno que pueda alterar todo lo que está sucediendo.


Al carajo con todo.