La semana es una
especie de sueño erótico que se mezcla en desventaja con una ciudad caliente.
todo es un manjar que se disfruta lentamente, mientras el alcohol sigue en el
torrente sanguíneo y no hay una salida cercana. la gente se apresura al pasar
al lado mío, pero creo que solo es una discriminación absurda al errar del
caminar; es una conjetura absurda entre el andar aprisa y el ser un completo
extraño.