martes, junio 3

33

Voy a intentar escribir todo esto de corrido y como me venga a la mente; sin ningún filtro o limitación, ninguno de esos que salen de tanto pensar las cosas.

Probablemente te encuentras pérdida entre la ciudad, mientras las sabanas no dejan de rodar y el reloj sigue apuntando a un futuro incierto, con las dudas como enjambre sobre tu pensamiento tangente; algunos malestares toman presencia en pasajes físicos que antes no tenían la relevancia del todo.

Lo cierto, es que el verte me hace recordar algunos momentos en los cuales estaba aún más perdido que ahora; gastaba los días caminando junto a los ejes viales y pensando que todo era un instante, y que de instante en instante todo terminaría donde deben terminar las cosas: en su lugar. luego uno se va dando cuenta que las cosas nunca terminan en su lugar, tú por ejemplo, estás en un lugar distinto a una frecuencia inexacta.

por lo pronto sigo acá, en mi lugar, mi terruño que se esconde entre los arroyos y hierbas crecidas; el que alberga las plagas en el verano y los ruidos en la noche, acechando, viendo pasar la gente a la espera de encontrar mi lugar exacto